Jorge Diciervo. Dedicada Contemplación

Si el arte es una ventana para las emociones, la obra pictórica de Jorge Diciervo es la vidriera de su propia sensibilidad, la cual, a su vez, despierta infinitos estímulos en quienes la observan.

Buena oportunidad para comprobarlo se dará entre el jueves 5 de julio y elsábado 4 de agosto cuando el artista exponga Dedicada Contemplación en la Galería Rubbers, Av. Alvear 1640, PB , una muestra que reúne una docena de cuadros actuales realizados en acrílico sobre tela y dibujos emblemáticos de perfiles realizados en 1984 que Diciervo nunca mostró al público.

En cada trazo, Diciervo da cuenta de una incesante búsqueda de equilibrios geométricos y sentimentales que pretenden, y logran, imprimir nostalgias, angustias e incertidumbres que son, de todos modos, compensadas con colores vivos y vibrantes.
Es reflejo de la sabiduría artística de un hacedor que, décadas atrás, supo ganar una importante beca, otorgada por el Fondo Nacional de las Artes, que lo llevó a Italia para afilar su lápiz ya que, por entonces, sólo dibujaba. Veletri, el pueblo en el que durante casi nueve meses dio a luz una nueva etapa como pintor, significó un punto de inflexión en su carrera.

Aquella experiencia, sin embargo, está plagada de contraposiciones. Porque mientras alumbraba un nuevo destino y lo inundaba la motivación que suelen despertar las promesas de un futuro plástico exquisito, también lo impactaba una soledad concurrida. La misma que hoy parecen manifestar el fondo de sus cuadros, habitados eso sí, por aquellas figuras cónicas, circulares, romboideas, cuadradas, rectangulares que tanto caracterizan la obra de Diciervo y que componen un complejo y frágil equilibrio.

Es que parece ser ese camino el sello de este sensible artista; el mismo que expuso individualmente por última vez en 2016 y que permitirá comprobar que tiene mucho más para trasmitir y que su arte nunca deja de madurar.

“Manda la tela. El tiempo que tardo en hacer un cuadro depende de lo que me va pidiendo”, asegura Diciervo. Es que es respetuoso del lenguaje y de la inspiración artística. En definitiva, de su pasión. No por nada define a la tela como “una amante celosa”.

Será que tiene claro que cada una de sus pinturas no son sino uno ensayo y una síntesis de la vida; un constante juego de equilibrio que se convierte en desafío cotidiano, en una utopía a la que tiende siempre, necesaria y espontáneamente.

Finalmente, vale destacar que en algunos de los cuadros que Diciervo expondrá en la Galería Rubbers, pueden descubrirse elementos que dialogan y que dan cuenta, al mismo tiempo, de un silencio que inspira.

Aquellos componentes, además, -metales y maderas- pertenecen a entornos alejados del arte. Sin embargo, Diciervo supo verlos e incluirlos de modo tal, que logró naturalizarlos en el mensaje poético que escribe con su pincel. Incluso, el soporte es, en algunos casos, la lona que suele tapar la carga de muchos camiones. Por lo que la sustentabilidad y la transformación también son cualidades que se identifican el quehacer de este artista virtuosamente incalificable.

 

Jorge Diciervo
Dedicada Contemplación

Desde el 5 de julio al 4 de agosto de 2018

Rubbers Internacional
Avenida Alvear 1640, PB
Ciudad Autónoma de Buenos Aires